Comida rápida, económica y nutritiva para estudiantes. Nutrición

La nutrición es lo más importante en la vida, pues de ella depende el buen funcionamiento físico y mental del cuerpo. El estudiante necesita un potente poder de concentración en su carrera, de otra forma, malgastará su tiempo y su dinero. Una alimentación deficitaria puede causar falta de concentración que, lamentablemente, el afectado suele notar demasiado tarde. 

Lo peor de todo es que la falta de concentración no viene sola, normalmente le sigue la pérdida de autoestima y autoconfianza, lo cual obliga a claudicar. El sentimiento de impotencia ante la adversidad lleva a la depresión, una espiral descendente que se ha de evitar a toda costa.

El cuerpo produce energía a partir de los nutrientes que ingerimos. El cerebro necesita la mayor parte de esa energía, de ahí se deduce que una buena alimentación estimula la actividad del cerebro. En las aulas, la capacidad de concentración decide si el estudiante aprobará sin grandes esfuerzos o tendrá que arrastrar asignaturas.

El estudiante que comienza la carrera universitaria y se aleja del hogar familiar se confronta de repente con situaciones imprevistas. El cuidado del cuerpo, la higiene y la alimentación son desde ese momento asuntos de su única incumbencia. La mayoría no sabe cocinar y dispone de poco tiempo y presupuesto, así pues, engulle productos elaborados de bajo nivel nutritivo que acallan rápido el estómago por un precio relativamente módico. 

Existe una manera de nutrir bien el cuerpo y la mente sin necesidad de gastar mucho tiempo o dinero. Por ejemplo:

Ensalada de lentejas con pimiento y sardinas asadas

Nutritiva, sabrosa, rápida, económica.  

Ingredientes por persona:

70 – 100 gramos de lentejas (depende de la voracidad del comensal)

150 - 200 g pimiento asado o pimiento morrón de lata, o, simplemente, crudo

Olivas sin hueso, pepinillos en vinagre y alcaparras a gusto del comensal

4 sardinas grandes

Preparación (aprox. 20 minutos)

Lavar las lentejas en un colador bajo un chorro de agua fría, escurrir. Cocerlas como indica el fabricante (con poca sal). Escurrirlas cuando estén listas.

Lavar las sardinas en abundante agua fría (no hace falta escamar ni abrir). Secarlas presionando suavemente con papel de cocina. Depositarlas sobre un grill, plancha de cocina o una amplia sartén embadurnada de aceite y asarlas por ambos lados a fuego medio, cambiando de lado de cuando en cuando. Salar ligeramente al final.

Mientras las lentejas se cuecen y las sardinas se asan, cortar el pimiento a trozos. En una ensaladera, mezclar los trozos de pimiento con las olivas cortadas por la mitad, los pepinillos troceados y las alcaparras. Añadir las lentejas cocidas y escurridas. Aderezar todo con poca sal (¡ojo! olivas, alcaparras suelen llevar sal), un buen chorro de aceite de oliva y una cucharada de vinagre (opcional).

Una vez asada, es fácil desprender los lomos de la sardina de la piel, cabeza y espina. Servir los lomos junto con la ensalada de lentejas y pimiento.

                               ¡Buen provecho!

El cuerpo necesita cada día principalmente hidratos de carbono, grasas, fibra, agua y proteínas. Vitaminas y minerales también son importantes en la alimentación diaria; sin embargo, estas sustancias se pueden equilibrar en el transcurso de una semana.

Los carbohidratos, las proteínas y las grasas aportan energía al organismo, mientras que las vitaminas y los minerales regeneran y desarrollan el cuerpo.

El agua es importante para células y tejidos, esta cumple una función principal en diferentes procesos; además, regula la transpiración y la temperatura del cuerpo. Es importante tomar suficiente agua.

La fibra es un tipo de carbohidrato que el aparato digestivo no puede digerir, pero que sirve de alimento a numerosas bacterias presentes en la flora intestinal, las cuales refuerzan el sistema inmunitario.

Valor nutritivo de la receta

Lenteja

Rica en fibra y carbohidratos complejos. Contiene un alto valor en proteínas vegetales. 

Vitamina B3, B5, B6, B1, B2, B6, B7, E, C, ácido fólico.

Potasio, fósforo, magnesio, azufre, cloruro, calcio, sodio.

Hierro, zinc, mangano, cobre, fluoruro, yoduro.

Pimiento 

Rico en vitaminas y minerales. Las vitaminas regulan el funcionamiento del sistema nervioso, desarrollo de la piel, huesos, vista, metabolismo, desarrollo hormonal, desarrollo del cerebro y anticuerpos.

Gran cantidad de vitamina C, potasio, magnesio y calcio. Además, cantidades menores de vitamina E, vitamina B3, hierro.

Pepino 

Contiene principalmente minerales. Los minerales participan en procesos metabólicos y tienen funciones vitales como, por ejemplo, el desarrollo y crecimiento de los huesos, dientes, estructura los tejidos y constitución de determinadas hormonas. 

Potasio, calcio, hierro, magnesio. Pequeñas cantidades de zinc, vitamina A, B1, B2, B9, K.

Oliva

Rica en polifenoles y ácidos grasos insaturados. La grasa sirve como reserva de energía, participa en la formación de la membrana celular, ayuda a asimilar algunas vitaminas y protege los órganos.

Además, la oliva contiene fósforo, calcio, potasio, sodio, magnesio, cloruro. Vitamina B1, B2, B6, B9, E, A

Alcaparras

Vitamina B1, B2, B3, calcio, potasio, magnesio, sodio, hierro, cobre y diferentes antioxidantes.

Los antioxidantes protegen las células de radicales libres, moléculas que originan en el cuerpo reacciones oxidativas perjudiciales mediante funciones metabólicas internas y también mediante influencias del exterior.

Sardina

20 g de proteína animal por cada 100 g y rica en omega-3, ácidos grasos que, según varios estudios clínicos, son saludables para el buen funcionamiento del corazón e indispensable para el cerebro, pues se sospecha que omega-3 promueve la memoria y las conexiones neuronales. Pero, como todo, la eficacia depende de la dosificación. Cada cuerpo necesita determinadas cantidades de determinadas sustancias, ni más ni menos. Estudia las reacciones de tu cuerpo a fin de constatar lo que necesita.

Una buena alimentación, ejercicio físico y relaciones sociales positivas mantienen mente y cuerpo en plena forma. La nutrición variada, equilibrada y sana existe y es la base del bienestar físico y mental. El tiempo y el dinero que se gasta en la cocina se ahorra en médicos y medicinas.